Dentro de su plan estratégico de expansión, Foodbox ha vuelto a contratar nuestros servicios para la reforma de dos establecimientos en Madrid pertenecientes a la cadena Santagloria. El primero de los locales es un esquinazo ubicado en el número 69 del Paseo de las Acacias con una superficie de 160 m2. El segundo se encuentra en la localidad de Alcalá de Henares, en la céntrica y comercial calle Libreros y cuenta con una superficie de 108 m2.
A nivel de obra, el gran reto en el Santagloria de Acacias ha sido la optimización de los recursos arquitectónicos de los que disponía el local. La antigua distribución, donde anteriormente desarrolló su actividad un banco, se ha logrado adaptar a las nuevas necesidades comerciales de la franquicia. Estas habilidades junto con el re-aprovechamiento de puertas, dinteles y escaparates ha repercutido en el ahorro final del coste de la obra, que ha originado la lógica satisfacción por parte del cliente.

La reconversión de un antiguo chaflán en un pilar de ladrillo visto, la mencionada remodelación de los numerosos escaparates de los que consta el local o el solado de la sala son algunos hitos de la obra que han dado lugar a un local sofisticado, acogedor y con un diseño muy atractivo, que nada más abrir ya ha enriquecido la vida social de la zona.
Por su parte, la actuación del Santagloria de Alcalá de Henares ha precisado una reforma de mayor calado. Se han ejecutado trabajos de demolición inicial, de instalación de una nueva red de saneamientos y el montaje de una campana extractora con su chimenea hasta la cubierta a través de un patio trasero, además de las habituales labores de albañilería, carpintería, electricidad e iluminación.
En un escaso plazo de cuatro semanas, se ha transformado un local diáfano en un llamativo establecimiento con mucho encanto que ha conquistado el agrado del cliente que regenta la franquicia.
¿Cómo se ha logrado crear este entorno tan agradable? Desde nuestra responsabilidad, la de la construcción, el acierto reside en la calidad en las ejecuciones. Unos aspectos que se comprueban en los acabados de los ladrillos rústicos en tonos ocres, en el juego de las maderas de bancos, mesas y paredes y en la acertada iluminación indirecta colocada en los frisos. El resultado final de la intervención origina una atmósfera cálida, que despierta en el cliente nada más entrar una sensación de tranquilidad y evasión, que contrasta con el bullicio exterior procedente de la calle.
Hablábamos al principio de los beneficios que aporta una empresa de reformas al negocio retail. Optimizar los recursos existentes en un local y el compromiso por la calidad de las ejecuciones son dos buenas de esas ganancias que asomaron en estas últimas reformas para Foodbox. Dos facultades que siempre viven presentes en el espíritu de cada una de las intervenciones que realizamos en el Grupo Spin.